Inspirado por lágrimas eléctricas, sentenciado en mi trono, despojando palabras desde mi interior, esperando aún, exteriorizando arduas melodías, día tras día, que apacigüen el alma de un pobre vigía.
Porque siempre hay un miedo dentro de todos, por mostrar quienes somos, aunque muchos no lo crean, ese alguien puede perderse, y creer que todo seguirá siendo igual sin el, es una vil mentira con la que nos engañamos durante muchos años.
El ser humano es muy extraño, física y mentalmente, tan simple y tan complejo en algunos aspectos... me intriga tanto, me intrigo tanto, ¿quienes fueron los que se perdieron? aún quedan tantos...
¿Realmente evolucionamos? o ¿solamente dejamos que muramos? Me intriga la superación de unos tantos, y el abandono de otros cuantos, y ¿quienes somos cada uno? ¿nos hemos rendido? ¿seguimos luchando por nosotros mismos? ¿fue equivocado lo que hicimos? ¿porque no cuidar de otros y caer siendo cuidado?
En vez de eso descendemos en una habitación a oscuras, donde pocas luces tenues nos permiten vislumbrar las habitaciones en la que se encuentran las demás almas.
Estos acordes terminados en melodía, son simples tonterías, con las que me extraña que ninguna mente juegue a parte de mi simple y vaga mente, criticada por todos e incomprendida para otros muchos.
No te rindas porque empezando con una hoja en blanco, puedes acabar con un texto amplio, ¿y tu? ¿eres de los que te rendiste? ¿o de los que pelean por su propio bando?
