jueves, 22 de noviembre de 2018

Llanto apagado

Llanto apagado entre lágrimas que queman como el ácido, labios de seda que quedan llenos de tristeza, un mirar penetrante que resalta tristeza, la culpa de un ser autodestructivo sediento de un querer incomparable, y temeroso de todo, ser que ha pensado alguna vez en acabar con todo y cobarde siempre ha sido, o valiente de vivir y sufrir viviendo.

Apoyo inconmensurable recibido por parte de un ángel, el cual ahora llora por culpa del ser despreciable, siempre odiado, maldito ha quedado, y en los fuegos del infierno queda viviendo, donde quedará ese ángel tan impresionante con autoestima de hierro inquebrantable que vio en el ser algo bueno.

Texto generado por el querer del ser llorando, sin saber exactamente el porque, al ángel acaba amando, cuando ya no queda nada el ser sigue luchando por aquel ángel que sus heridas fue curando, sin embargo su llanto apagado aun no ha cesado, querer hablar querer amar querer a su ángel ahora lastimado y solitario, al cual el ser todo estaba dando, sigue sin saber porque todo ha terminado pero aqui tienes ángel, un texto que cuenta un pequeño relato de como te he amado, el ser que siempre se está despreciando a mi querido ángel amado.

lunes, 29 de octubre de 2018

Gracias por todo.

Cansado de vestir seriedad en mis labios, cuando he tenido un corazon palpitando entre mis manos, siempre se me ha resbalado incluso siendo lo mas posible delicado, río de emociones rotas que han fluido a través de mi, rotas por mi no poder sentir sin embargo estaban posiblemente todas ahí, fue divertido, relajante y emocionante todo lo que sucedió, ahora me quedo como al principio, sólo, roto, sin compasión que me llene en mi interior, que mal he debido actuar, que mal habré hecho y dicho las cosas, ya en otra ocasión será, pues es malo dejar sola a la soledad.

Mis lágrimas agotadas vacías han quedado oxidando mi alma una vez más, pues nunca llevo razón aunque sienta dolor el cual no busco, que mas da si por dentro soy como un muro...

Pintado de graffitis que hacen de cicatriz, lleno de palabras que jamás suelo decir, de textos vacíos que una vez significaron algo, un muro lleno de miedo, inseguridad y soledad, un muro medio derrumbado, el cual se ira regenerando para tapiarme a mi al otro lado.

El anhelo de abrazos, ese olor especial como ningún otro, necesito en la oscuridad ser dejado donde reino a mi antojo, reinando a nadie, tratando de llorar solo, con un corazón que palpitó tanto que al final acabo parado.

Solo me queda por decir gracias por todo.

sábado, 1 de septiembre de 2018

El fin de un cualquiera

Tú que te has convertido en el elegido, poseedor de la llave que elimina el vacío, dime como volver a estar vivo, como eliminar toda inquietud y fatiga, las bengalas fallidas se han extinguido en el poder del tiempo y nadie ha acudido, todo acaba yendo a peor sin saber si realmente estoy enloquecido.

En la búsqueda perenne sigo sin hallar ninguna respuesta verdadera, todas mis fuerzas merman, el pasado es donde vive mi yo verdadero y el del presente es del que reniego, habiendo conocido ríos de tristeza y pena imperecedera, este veneno eterno me desconecta, inhibido y apartado de cualquier cosa que antes era.

En la cuerda floja de la vida a temprana edad, sin saber explicar como he llegado ni como he caído ni porqué, me ahogo todos los días en todas las cosas que hago y no puedo hacer nada más de lo que ya he hecho, ningún grito de rabia ha servido, ahora tiemblo, inmóvil... débil e inútil, inservible para cualquier cosa de la que antes me enorgullecía.

Posiblemente sea el final de un blog como otro cualquiera, puede que sea el fin de un jugador como otro cualquiera, de un escritor, de un amante de la música, de una vida joven y enérgica... quizás el fin así sea... quien tiene miedo a vivir y morir y tan solo sentado espera.

Un final como otro cualquiera.

sábado, 7 de abril de 2018

Fragmentos Del Alma

En un mirar puedo ver, un universo, un fragmento del alma viviendo en los ojos de otro ser, en una acción obtener, un querer, un fragmento del alma de ese alguien.

En un saludar de un día normal, en una pregunta, en una escultura, sobre un lienzo, en la música, en todo lo que poco o mucho perdura, en el dolor, en el amor, en la comprensión, en el sol y en la luna, en un texto o en una duda, desfragmentándose por momentos lo que en teoría para siempre dura, un alma que brilla, que ensombrece, que tenue palpita.

Una caricia, un abrazo, un grito desgarrador consumido por la rabia, en los actos actos benevolentes y en los más decadentes, en una discusión , en un adiós, en el silencio que guardan dos personas, en las risas que mismamente comparten o compartían.

También pueden hallarse en el miedo, en las pesadillas, en todos y cada uno de los recuerdos, en el polvo estelar y en las nebulosas, en la vida... y en sus resquicios descansan la muerte.

Cómo también se encuentran en un papel casualmente, olvidado por el tiempo y terminado después de seguir leyendo, lo que comenzó como una idea distorsionada, acaba siendo completada por la inspiración de...

Un fragmento de mi alma.