domingo, 27 de diciembre de 2015

Delirios de una noche

Todo lo que una vez quise cerca, ahora lo alejo, todo lo que una vez creé, ahora lo destruyo.
Simultáneamente un llanto y una carcajada resuenan por mi obsoleta mente, pensamientos triviales que son ignorados en su máximo esplendor, caminantes de una senda que se desvía a lo mas profundo de nuestro interior, donde no hallan luz, hasta haberse consumido por si mismos.

Delirios de una noche o reflexiones de un día, todo solo, en el sonido se queda.

viernes, 13 de noviembre de 2015

¿Que me dirá?

Que querrás decirme, cuando sólo quieres hundirme, cuando creyendo en que pueda ver la luz, tornas en oscuridad toda mi realidad.

Que querrás decirme, cuando sólo sabes herirme, con disputas innecesarias y amargos momentos que no se desean.

Que querrás decirme, cuando no sé cómo despedirme, de quien ha estado conmigo y no me dejará irme.

Dime vida mía, como puedo saber todo lo que quieres que sepa, como ayudar a quien yo quiera, como volver a ser quien yo creo que debería ser, como hacer entrar en razón cuando no soy escuchado, y como ignorar cuando yo he sido ignorado.

Como buscar inspiración cuando todo en mi mente da vueltas, como centrarme por lo que nadie en mi apuesta.

miércoles, 11 de noviembre de 2015

Palabras plasmadas

Ya perdí mi guía, se fue con mi alegría, con una fuerza y energía inmensa, que ni la mas poderosa tormenta lleva.

Fue duro, y duró mucho... pero la calma llega, y una bruma densa se esparce como la niebla que mi juicio ciega.

El miedo a la muerte es mas frecuente y el dolor se hace presente, en los días que solo funciona mi mente.

Átala, no dejes que escape, pues con ella se irá el ave de la vida, y señalará a la parca maldita, de la que nadie sabe nada y asimilan .

Y aunque no deba rimar, siempre estará bien plasmar, en poesía lo que significa para uno la vida, tanto penas como alegrías.

martes, 3 de noviembre de 2015

Desgaste

Presiona mi pecho y siente mi vacío corazón, donde nada late y donde nada nace, únicamente mantiene a una marioneta que se mueve, lentamente desgastándose en su eterna y lenta muerte...

Como las plumas

Los sentimientos son como las plumas de los pájaros, hay muchos y cada uno son de un color u otro, al igual que las plumas, los sentimientos se desprenden también... ¿volverán a crecer más frágiles que antes o más fortalecidas? con mucho tiempo y paciencia.

Y como las plumas, hay gente recoge los sentimientos que ya no están y los observan intrigados, sin saber que es lo que fueron y como se acabaron.

Amargo recuerdo

Lágrimas ácidas de un amargo recuerdo, pensamientos tormentosos en la calma de la oscuridad, despedidas de personas y de esperanzas. Caminos que siempre se separan y acaban en un callejón sin salida, volviendo obligatorio tornar hacia atrás y tener que tomar otra dirección erronea.

Lo que eras...

Eras mi esperanza en el día a día, el candado que retenía a mis demonios, el soporte de mis pensamientos más pésimos, los halagos que nadie más se atrevía a decirme, la melodía en todos mis días, el saber que alguien me necesitaba, la única cosa que me hacia ver cosas buenas en el futuro, y evitaba que pudiera mirar el pasado, mi ciega confianza y mi convicción, ese algo que me daba lo que a la gente le gusta ver en mí.

Al tener tanto y perder eso y más de golpe no se puede esperar nada más, simplemente seguir y esperar sabiendo que no volverás.

Volver...

El ser descuartizado volvió desde lo más profundo de la tierra, y se sanó como pudo, para ayudar a quienes le dejaron de lado.

Su fidelidad era tal, que aún no sintiendo sentimiento alguno, no podía dejar pasar cosas a su alrededor, que no le parecían justas.

Sus últimas palabras antes de que sus cuerdas vocales se desgarrasen y dejara de moverse fueron: únicamente... no soy como los demás.

Corazón bombeante

Cicatriza heridas sangrantes, mi pobre corazón bombeante, no te rindas por más que digan, triunfa y cura tu dolorosa herida.

Y nada sentía, pero frío tenía... y sonreía, pero lloraba... y gritar intentaba, pero en susurro se quedaba, y lentamente esperaba.

Sus alas no volaban, mientras el se arrastraba y su mirada en el pasado se quedaba, desvaneciéndose su aliento en el viento.

Firmemente confiaba, y golpes intercambiaba, intentando resolver dudas que en el olvido se marchitaban, como las flores que le rodeaban.

Si lees esto no hay duda, mi corazón bombeante hoy no me escuda, toca esperar observando día tras día la luna.